¿Cómo pagar en Internet de manera segura?

Comprar, pagar, transferir dinero a otra persona, son solo algunas de las transacciones que pueden hacerse de manera fácil y rápida vía online y, para que puedas hacerlas de forma segura, en este artículo te vamos a enseñar cómo minimizar cualquier riesgo a ser estafado o que te roben el dinero, sobre todo cuando se trata de pagar en internet.

La idea es ayudarte a combatir la desconfianza e inseguridad que puedas tener a la hora de pagar vía online, ya que solo es cuestión de conocer y poner más atención a ciertos detalles que pueden indicarte, por ejemplo, si el sitio web donde estás haciendo la transacción es seguro o, incluso, si la información que te piden de tus instrumentos de pago será debidamente resguardada.

Aunque son varios los detalles y las señales a las que debes prestar atención para proteger tu integridad financiera, en el texto que sigue a continuación te explicaremos cuáles son los más importantes que debes dominar, para que puedas hacer tus próximos pagos y transacciones en internet como un verdadero experto y sin riesgos:

– Cerciórate de que la dirección del sitio comience con “https”: cuando compres en línea o visites sitios web para realizar operaciones bancarias y otras transacciones confidenciales, asegúrate siempre de que la dirección del sitio o de la página web comience con “https”, en lugar de solo “http” y, además, verifica que tenga un ícono de candado cerrado en el campo de la dirección URL que te muestra tu navegador en la parte superior.

Estas dos señales te indican que el sitio web es seguro y que utiliza un sistema de cifrado para codificar tus datos y así, evitar que puedan ser interceptados y robados por otros durante la transacción. Además, es importante que prestes atención y evites visitar las páginas web que tengan errores de ortografía o gramática en sus direcciones, ya que podría ser la imitación de una página web legítima. En ese caso, puedes usar la aplicación de búsqueda segura que te ofrece tu antivirus o descargar una de la web, y de esa forma evitarás las visitas a sitios riesgosos.

– Verifica a dónde te llevan los link a los que haces click: si ya instalaste un buen antivirus en tu computadora o en tu teléfono para que te garanticen seguridad online, entonces trata de no atraer el peligro haciendo click en cualquier aviso, botón de suscripción o publicidad, sin constatar antes su credibilidad y legitimidad. Para verificar los enlaces, solo basta con que coloques el cursor sobre el link al que quieres acceder y verás cómo se despliega en la parte inferior izquierda de la página la dirección URL a donde éste te llevará.

Debes saber también que la mayoría de las amenazas en línea se basan en técnicas de engaño, conocidas como “phishing” o “ingeniería social”, con las cuales personas inescrupulosas logran que les reveles tanto información personal como confidencial, para utilizarla con fines fraudulentos, mediante la suplantación de tu identidad. Estas formas de engaño suelen aplicarse, por ejemplo, a través de correos electrónicos “no deseados”, falsas ofertas “gratuitas”, señuelos y cuestionarios en línea.

En esos casos, lo que buscan los ladrones informáticos es atraer tu atención y llevarte a que hagas click en enlaces peligrosos o que les faciliten el acceso a tu información personal y confidencial.  Para no caer en esas trampas, solo debes tener cuidado con aquellas ofertas que parecen demasiado buenas para ser ciertas o que solicitan demasiada información.

– Utiliza contraseñas complejas: quizás ya te lo hayan dicho muchas veces, pero crear contraseñas sólidas y únicas para cada una de tus cuentas, es realmente la mejor forma de mantener segura tu información personal y financiera. Esto cobra importancia en la era actual de los ladrones informáticos, que son personas inescrupulosas capaces de robar los datos de decenas de miles de contraseñas de usuario.

Por lo tanto, si acostumbras reutilizar tus contraseñas para diferentes cuentas, corres el riesgo de que uno de estos ladrones pueda tomar esos datos filtrados de un ataque y usarlos para acceder a varias de tus cuentas. En este caso, el mejor consejo es que utilices un software de administración de contraseñas, el cual te ayudará a almacenar y crear contraseñas seguras para cada una de tus cuentas, desde la del banco y las tiendas electrónicas donde haces tus compras, hasta la de tu correo electrónico.

En este caso también es importante que verifiques si tus cuentas en línea te ofrecen formas de autenticación por múltiples factores como, por ejemplo, preguntas clave, códigos de verificación enviados por mensaje de texto (SMS), entre otros. La idea de estos mecanismos es que te veas obligado a suministrar diferentes tipos de datos de comprobación que faciliten la verificación de tu identidad.

– No utilices redes WiFi públicas para hacer tus pagos: si ya has asegurado el acceso a tus cuentas con contraseñas seguras, ahora debes preocuparte de que tu conexión a internet también esté protegida. Quizás en tu casa o trabajo utilizas una conexión inalámbrica protegida con contraseña y que codifica todos los datos que envías online. Pero el problema surge cuando te ves tentado a usar una red WiFi pública y gratuita, ya que por lo general estas conexiones no están protegidas y son fácil blanco de ladrones informáticos.   

El problema con el WiFi público es que, a menudo, no garantizan la seguridad de los datos. Eso significa que es muy fácil para un ladrón informático acceder a tus dispositivos móviles, como teléfonos celulares, tablets y computadoras portátiles, así como a toda la información que tienes guardada en esos equipos.

Para que no seas vulnerable a estos riesgos, lo recomendable es que inviertas en una aplicación de Red Privada Virtual o VPN, por sus siglas en inglés. Este tipo de software crea una especie de túnel protegido en internet, a través del cual tus datos pueden viajar de forma segura. De esa manera, puedes hacer cualquier transacción bancaria, de pago o, incluso, acceder a tus servicios de correo, sin el riesgo de que puedan interceptar tu información personal o confidencial.

También es importante que incluyas a tu lista de herramientas de seguridad, la instalación de un firewall o cortafuegos. Este tipo de aplicaciones generalmente vienen como un complemento de tu antivirus. Su función es ser una barrera electrónica que bloquea el acceso no autorizado a tu computadora o dispositivos móviles. De esta forma, puedes garantizar que cualquier dispositivo que se conecte a internet a través de la red WiFi de tu hogar, por ejemplo, esté protegido de posibles amenazas.

– Protege tus dispositivos móviles: todos los que tengas, desde el teléfono celular, hasta la tablet o la computadora portátil, son equipos susceptibles a amenazas en línea que surgen con una velocidad abismal. Hoy un teléfono móvil inteligente está expuesto a infinidad de riesgos, desde aplicaciones malintencionadas hasta enlaces peligrosos que te llegan por mensajes de texto, correos electrónicos o, inclusive vía Whatsapp.

Si no quieres caer en estas trampas, lo recomendable es que no respondas a mensajes de desconocidos, verifiques la credibilidad de quién envía la información y que solo descargues aplicaciones desde las tiendas oficiales o aquellas que tengan buena reputación entre los usuarios o que tengan las mejores opiniones y recomendaciones. También es importante que tengas activado o habilitado el antivirus en tu teléfono, así como en cualquier otro dispositivo móvil, a fin de prevenir cualquier posible riesgo de seguridad.

– Mantén actualizadas todas tus aplicaciones, incluyendo el antivirus: así como debes mantener actualizado el sistema operativo y las aplicaciones de trabajo de tu computadora, también es necesario que hagas lo mismo con las aplicaciones en tu teléfono, tu tablet, etc.. Recuerda que las actualizaciones, por lo general, incorporan mejoras y ajustes que corrigen fallas y posibles riesgos de seguridad.

Si no tienes tiempo o no te gusta estar pendiente de verificar las actualizaciones periódicamente, puedes activar el modo automático, para que apenas salga una nueva actualización, ésta sea instalada en tu dispositivo. También es importante que tengas configurado el antivirus para que regularmente haga un chequeo o escaneo de tu equipo, con el fin de prevenir la acción de cualquier amenaza que ponga en riesgo tus datos personales y confidenciales.

– Ponte al tanto de las últimas modalidades de estafas online: aunque no sepas de informática o de tecnología, siempre es conveniente que te mantengas al tanto de cuáles son las amenazas más populares en la red y qué tipo de artimañas están usando los ladrones informáticos para apoderarse de tu información privada. Entre las estafas más comunes puedes hallar: la suplantación de identidad o phishing, robo de datos por páginas web falsas, solicitudes falsas de donaciones, las cadenas de correo que prometen que ganarás dinero, estafas de viajes y compras en línea, falsas oportunidades de negocio desde tu casa, entre otras.

Para estar informado al respecto, intenta suscribirte a un boletín electrónico sobre seguridad informática; en este caso puedes comenzar por los que promueven los propios desarrolladores de antivirus, como Panda Software, McAfee, Kaspersky, Symantec Norton, entre otros.  También puedes seguir en las redes sociales a algún experto en la materia o leer con regularidad un blog sobre el tema como, por ejemplo: Krebs on security, Schneier on Security, Forbes, SC Magazine, Security Week, The Last Whatchdog y Mashable, entre muchos otros.  No olvides que estar informado puede evitar que seas una víctima más de un ladrón informático o, incluso, ahorrarte dinero y hasta un mal rato.

– Invierte en un buen antivirus y crea copias de tus archivos: aunque suene fastidioso, es necesario que siempre prestes atención a lo que haces mientras navegas por la red, qué tipo de sitios visitas, qué tipo de información compartes, etc.. Invierte en un buen software antivirus, como Panda Software, McAfee o Symantec Norton Antivirus; configúralo adecuadamente y mantenlo actualizado. Por último, no olvides hacer con regularidad una copia de seguridad de todos los datos sensibles de tus dispositivos, así podrás recuperarlos en caso de que algo salga mal.

Aunque a primera vista te resulte complicado poner en práctica todos estos consejos, debes tener en cuenta que la mayoría están vinculados, así que uno te llevará al otro. De todas formas, se trata de una implementación progresiva. Recuerda que lo importante es que los apliques, ya que solo tomando estas medidas preventivas podrás hacer más rápido tus pagos, desde la comodidad de tu hogar o desde tu teléfono, sin temor a que te roben tus datos o el dinero.

Con información de: McAfee.com