Estos son los síntomas en tu bebé que deberían alarmarte

Imagen: Pixabay.com

Ya sea por un medicamento o por la salida de un dientecito, las madres no dejamos de mortificarnos cuando notamos variaciones en la temperatura corporal de nuestros pequeños o su cambio de conducta.

En casi todas las oportunidades, las madres primerizas tienden a preocuparse por cosas que no ameritan demasiada atención, y en otros asuntos suelen ser más despreocupadas, cuando debería atenderse seriamente una situación con su bebé.

Existen síntomas del bebé que pueden ser realmente insignificantes, mientras que otros suelen pasan inadvertidos siendo bastante relevantes, lo suficiente como para recurrir al pediatra. En todo caso, te indicamos esos síntomas que debes tener en cuenta como algo importante en la salud de tu hijo, que te permitirá reaccionar a tiempo ante alguna grave enfermedad.

Tabla de contenidos

Fiebre

Los expertos recomiendan que tener fiebre inexplicablemente es señal de una infección, que importante o no, requiere cuidados y atenciones especiales. En ese caso, lo ideal es que acudas al médico, si tu hijo tiene menos de tres meses de edad y presenta fiebre.

Después de esa etapa crítica, cualquier fiebre superior a los 40 grados centígrados acompañada de petequias o manchas diminutas en la piel del bebé, las cuales aparecieron a causa de la fiebre, es motivo de peso para asistir al médico, ya sea fijo o en emergencias. Lo importante, en todo caso, es el chequeo.

Dificultad para respirar

Ya sea por exceso de moquitos o por asma, si notas que a tu bebé le es un verdadero trabajo respirar con normalidad, es urgente que lo lleves al médico. Si notas que ha perdido el apetito y que su piel se está tornando de un color azulado, no dejes para mañana esta visita.

Diarrea y vómitos

Cuando el bebé presenta cuadros frecuentes de vómitos y diarrea hay que evitar a toda costa una deshidratación. En ese caso, la visita al médico lo más pronto posible podrá frenar la deshidratación con el tratamiento indicado para detener la pérdida de líquido mediante la diarrea y el debilitamiento que también causa el acto de vomitar.

Caídas fuertes y golpe en la cabeza

Si ha sido una caída donde no ha habido ningún objeto peligroso ni desde una altura superior a la mitad de la medida del bebé, no hay de qué preocuparse. Lo importante en estos casos es comprobar que no hubo pérdida de conocimiento, ni vómitos tras la caída.

Nunca debemos suponer nada, por lo que dar atención a los síntomas que presente nuestro bebé es importante, siempre que no te vuelvas una madre excesivamente protectora y preocupada.

Fuente: Padresehijos.com

Pinea esta imagen en Pinterest!





Deja tu comentario



Real Time Web Analytics